Náuseas y vómitos
Revisado por Dr Toni Hazell, MRCGPÚltima actualización por Dr Doug McKechnie, MRCGPÚltima actualización: 5 de agosto de 2024
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En esta serie:DeshidrataciónMedicamentos contra las náuseas
Las náuseas son la sensación de querer estar enfermo (vomitar), mientras que los vómitos son estar enfermo o "vomitar". Estos síntomas comunes suelen estar causados por problemas a corto plazo, como infecciones estomacales, intoxicaciones alimentarias, embarazo o mareos por movimiento. La mayoría de los casos se resuelven por sí solos, pero los síntomas persistentes o graves pueden requerir atención médica.
Este folleto explica las causas más frecuentes, consejos de autocuidado, opciones de tratamiento y cuándo acudir al médico.
En este artículo:
Puntos clave
Las náuseas (sentirse mal) y los vómitos (estar enfermo) son síntomas comunes que casi todo el mundo experimenta a lo largo de su vida.
Hay muchas causas de náuseas y vómitos, como la gastroenteritis, la intoxicación alimentaria, el mareo por movimiento, las migrañas, los medicamentos, el embarazo y el alcohol.
Los tratamientos incluyen reposo, beber mucho líquido, comer alimentos ligeros y tomar medicamentos contra el mareo si es necesario.
Si los vómitos duran más de 48 horas, son muy intensos o vienen acompañados de sangre, pérdida de peso inexplicable o confusión, debe buscar ayuda médica inmediatamente.
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¿Qué son las náuseas?
Las náuseas son la sensación que se tiene cuando se está a punto de enfermar (vomitar). A menudo, las personas describen la sensación de náuseas como "sentirse mal", como si fueran a ponerse enfermas.
Las náuseas son un síntoma muy común, y casi todo el mundo las ha experimentado al menos una vez en su vida.
A veces, las personas sienten náuseas pero no llegan a vomitar. A menudo, la sensación de náuseas mejora después de estar enfermo, aunque a veces puede permanecer a pesar de vomitar, lo que puede ser muy desagradable.
¿Cuáles son las causas de las náuseas y los vómitos?
Las náuseas y los vómitos son síntomas frecuentes. Hay muchas causas que pueden provocar náuseas y vómitos. A continuación se enumeran algunas de las causas más comunes o importantes. Consulte los enlaces para obtener más información sobre cada una de ellas.
Gastroenteritis (véase también Gastroenteritis en niños).
Se trata de una causa muy frecuente de vómitos y diarrea.
Intoxicación alimentaria (véase también Intoxicación alimentaria en niños).
Consumo de cannabis.
Embarazo (ver Náuseas y vómitos en el embarazo).
Síndrome premenstrual. Las náuseas antes de la menstruación pueden ser normales en algunas personas.
Problemas del oído interno (ver Neuritis vestibular y laberintitis y Enfermedad de Ménière.
Medicamentos: por ejemplo, tratamientos contra el cáncer como la quimioterapia.
Infecciones urinarias (ver Cistitis en mujeres, Infección de orina en hombres, Infección de orina en niños, Infección de orina en ancianos e Infección renal (Pielonefritis).
Trastornos alimentarios (por ejemplo, bulimia nerviosa).
Problemas estomacales, por ejemplo:
Enfermedad por reflujo gastroesofágico (ERGE). Está causada por el ácido que sube del estómago al esófago (conducto alimentario). Provoca dolor en la parte superior del estómago y (en el reflujo) sensación de quemazón o ácido detrás del esternón. El reflujo también puede producirse en bebés.
Úlceras de estómago. Se observan en enfermedades hepáticas graves y en el cáncer gástrico, y suelen causar dolor intenso e intolerancia a los alimentos. Si las úlceras sangran, pueden producirse vómitos de sangre.
Gastroparesia (retraso en el vaciado del estómago). Puede provocar vómitos después de comer. Es más frecuente en diabéticos, personas operadas para perder peso y en la enfermedad de Parkinson.
Afecciones metabólicas, por ejemplo:
Diabetes, sobre todo si está mal controlada. La cetoacidosis diabética (cuando en la sangre circulan productos de descomposición denominados cetonas) se produce con mayor frecuencia en pacientes que reciben insulina, y suele estar causada por el malestar y por no utilizar suficiente insulina. Puede provocar vómitos persistentes y crecientes.
Enfermedad de Addison. Esta enfermedad rara se desarrolla a lo largo de varios meses y también provoca fatiga intensa, pérdida de peso, tensión arterial baja y otros síntomas.
Hipercalcemia. Un nivel elevado de calcio se debe en la mayoría de los casos a una hiperactividad de la glándula paratiroides, pero también puede deberse a ciertos tipos de cáncer.
Otras causas
La apendicitis, la inflamación del páncreas (pancreatitis), los cálculos renales, las úlceras de estómago y los cálculos biliares pueden provocar fuertes dolores de estómago, náuseas y vómitos. Si es grave, llama al 111 para pedir consejo urgente o al 999 para llamar a una ambulancia si crees que es una emergencia potencialmente mortal.
Bloqueo (obstrucción) del intestino: los vómitos repetidos e intensos pueden deberse a un bloqueo en cualquier parte del intestino. Puede tratarse de un asa retorcida del intestino, un tumor canceroso o un estrechamiento no canceroso. Suele ir acompañado de dolor abdominal intenso. Como hay una obstrucción, normalmente no podrá abrir el intestino. Se trata de una urgencia y hay que llamar a una ambulancia.
Aumento de la presión cerebral: la meningitis, los tumores cerebrales y los traumatismos craneoencefálicos pueden aumentar la presión cerebral y provocar náuseas y vómitos. Llama al 999 para pedir una ambulancia si sospechas que tu hijo tiene meningitis.
Enfermedad hepática: por ejemplo, hepatitis A, hepatitis B, cirrosis hepática. Habrá otros síntomas, como coloración amarillenta de la piel y del blanco de los ojos(ictericia) y, por lo general, dolor en el hígado.
Problemas renales: por ejemplo, enfermedad renal crónica, que suele provocar náuseas cuando es grave, y cálculos renales (que también pueden causar dolor).
Debe consultar a su médico si vomita repetidamente durante más de 48 horas, se siente débil, vomita sangre o tiene problemas de pérdida de peso o dificultad para tragar. . Si vomita una gran cantidad de sangre, puede ser más apropiado que acuda a Urgencias.
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¿Cuál es la diferencia entre náuseas y vómitos agudos y persistentes?
Las náuseas y/o vómitos agudos suelen durar menos de 24-48 horas. Lo más frecuente es que se deban a una infección gástrica o una intoxicación alimentaria y son autolimitadas (es decir, cada una cesa por sí sola). Este tipo de náuseas y vómitos no suelen requerir ninguna intervención, a menos que sean muy graves, el vómito sea inusual (por ejemplo, con sangre) o la persona afectada sea un bebé o un niño pequeño y no administre líquidos, o si la falta de líquidos en el organismo (deshidratación) es un problema.
Las náuseas y los vómitos persistentes son los que duran 48 horas o más. Pueden tener las mismas causas que las náuseas y vómitos agudos, pero las infecciones simples y las intoxicaciones alimentarias empiezan a parecer menos probables a medida que pasa el tiempo, y otras posibles causas pasan a primer plano. Algunas son más graves que otras, y muchas provocan también otros síntomas.
Su médico querrá saber
El médico querrá saber cuánto tiempo ha durado su sensación de náuseas y vómitos y si tiene algún otro síntoma. El médico le preguntará sobre todo por los síntomas que puedan sugerir una enfermedad grave subyacente. Son las llamadas "señales de alarma". El tipo de información que su médico querrá saber incluye lo siguiente:
¿Empezó de repente o se desarrolló con el tiempo? ¿Hay algo que lo haya desencadenado? ¿Cuánto ha durado?
¿Cuándo vomitas? ¿Es peor cuando mueves la cabeza?
¿Tienes fiebre?
¿Tose sangre o bilis?
¿Se encuentra mal? ¿Tiene fiebre, pérdida de peso o dolores abdominales? ¿Tiene dolores de cabeza?
¿Cuánto alcohol bebe?
¿Cuándo te vino la regla por última vez? ¿Podría estar embarazada?
¿Ha empezado a tomar algún medicamento nuevo recientemente?
Esta información ayudará al médico a averiguar la causa de sus náuseas y/o vómitos. Su médico le examinará. Le examinará la temperatura, el tórax y el abdomen. Es posible que le pidan una muestra de orina y un análisis de sangre. Es posible que le pidan una prueba de embarazo. Es posible que le recomienden otras pruebas de estómago y abdomen. Es posible que le deriven a un especialista.
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Qué hacer para aliviar las náuseas y los vómitos
Llame al 111 si la enfermedad (vómitos) es grave y se encuentra débil o tiene un fuerte dolor de barriga (abdominal). Si está tan enfermo que cree que es una urgencia vital, llame al 999.
Acuda al médico urgentemente (en el plazo de unos días) si presenta síntomas de "alerta roja".
Consulte a su médico si los vómitos duran más de 48 horas y no mejoran.
Evite la falta de líquido en el organismo y los signos de deshidratación: beba poco y a menudo para reponer el líquido que haya perdido. Beber pequeñas cantidades con regularidad es más fácil de retener. Considera el uso de bebidas rehidratantes, como Dioralyte®.
Si comer alimentos le provoca náuseas, puede intentar evitar los alimentos sólidos, pero puede que comer pequeñas cantidades de comida sencilla le haga sentirse un poco mejor. Evita los alimentos con olores fuertes, que pueden empeorar las náuseas.
Si tiene mareos (de viaje) y no tiene acceso a medicamentos:
Intenta interrumpir el trayecto para tomar el aire, beber agua fría y, si es posible, dar un pequeño paseo.
Intenta cambiar de asiento (por ejemplo, colócate en la parte delantera de un coche o en el centro de la cubierta de un barco).
Respire aire fresco y evite los olores fuertes (por ejemplo, los vapores de gasolina y gasóleo).
Cierra los ojos (y mantenlos cerrados durante todo el trayecto). Así se reducen las señales "posicionales" de los ojos al cerebro y disminuye la confusión.
No intentes leer.
Prueba a escuchar un audiolibro con los ojos cerrados.
Intenta dormir.
No leas ni veas películas.
No mires objetos en movimiento, como olas u otros coches. En su lugar, mira hacia delante, un poco por encima del horizonte, a un lugar fijo.
Si eres el conductor, ofrécete a conducir, ya que es menos probable que te sientas mal si te concentras en la carretera.
Síntomas de alerta que pueden sugerir una enfermedad subyacente grave
Las siguientes características pueden indicar una enfermedad subyacente grave:
Dolor de barriga (abdominal) intenso.
Temperatura elevada (fiebre), rigidez de nuca, erupción cutánea, reticencia a mirar la luz.
Debilidad creciente/pérdida de conciencia.
Vómitos continuos o que empeoran después de 48 horas.
Busque atención médica urgente si las desarrolla.
Los vómitos y la diarrea en los niños suelen estar causados por una gastroenteritis, pero los vómitos sin diarrea pueden sugerir una causa diferente, incluidos otros tipos de infección. Si un niño tiene vómitos persistentes pero ningún otro síntoma, acuda al médico.
Problemas causados por náuseas persistentes
Las náuseas persistentes, que son las que se experimentan en el embarazo, en un largo viaje por mar, al tomar quimioterapia o debido a una enfermedad crónica, pueden ser muy angustiosas. Las náuseas intensas pueden ser agotadoras y deprimentes, y algunas personas piensan que son peores que los vómitos (que pueden parecer un alivio para las personas con náuseas persistentes).
Problemas causados por vómitos persistentes
Los vómitos repetidos pueden causar deshidratación, sobre todo en bebés y niños pequeños.
Los vómitos persistentes provocan la pérdida de agua y sales del organismo, como sodio, potasio y cloruro. La alteración del equilibrio de las sales del organismo puede provocar complicaciones, como irregularidades del ritmo cardiaco. Puede ser muy difícil reponer los líquidos y sales perdidos mientras continúan los vómitos.
El daño del esmalte dental es frecuente en personas con bulimia nerviosa que se inducen el vómito de forma regular como parte de su enfermedad. El ácido del estómago erosiona y daña los dientes, y las enzimas digestivas dañan las encías, lo que provoca complicaciones dentales.
Los desgarros del revestimiento esofágico(desgarros de Mallory-Weiss) pueden provocar hemorragias, y es posible que vea sangre en el vómito. Los vómitos recurrentes también pueden provocar la inflamación del estómago y el esófago(gastritis y esofagitis).
Vomitar estando inconsciente (por ejemplo, tras un exceso de alcohol) puede ser muy peligroso, ya que puede provocar que el contenido del estómago se introduzca en la tráquea y, por tanto, en los pulmones, donde puede obstruir la respiración o provocar una inflamación pulmonar grave.
Preguntas más frecuentes
¿Por qué tengo náuseas por la mañana?
Las náuseas matutinas pueden deberse a varias causas, como un nivel bajo de azúcar en sangre, hambre, reflujo ácido, deshidratación, ansiedad o incluso ciertos medicamentos. En algunos casos, también pueden estar relacionadas con el embarazo o con enfermedades subyacentes.
¿Puede el estreñimiento provocar náuseas?
El estreñimiento puede provocar náuseas porque la acumulación de caca en los intestinos ralentiza la digestión y aumenta la presión en el estómago. Esto puede provocar hinchazón, malestar y, a veces, náuseas.
¿Puede la ansiedad provocar náuseas?
La ansiedad puede provocar náuseas. Cuando uno se siente ansioso, el cuerpo activa la respuesta de "lucha o huida", liberando hormonas del estrés como la adrenalina. Esto puede afectar al sistema digestivo, ralentizando o acelerando la digestión, lo que puede provocar síntomas como las náuseas.
¿Por qué tengo náuseas después de comer?
Las náuseas después de comer pueden deberse a un exceso de comida, a comer demasiado rápido o a consumir alimentos grasos o picantes. También pueden deberse a problemas digestivos como el reflujo ácido, intolerancias alimentarias o infecciones.
¿Por qué me siento mejor después de vomitar?
Vomitar puede hacer que te sientas mejor porque elimina los irritantes, las toxinas o el exceso de ácido estomacal que provocan las náuseas y alivia temporalmente la presión y las molestias estomacales.
Lecturas complementarias y referencias
- Diarrea y vómitos en niños menores de 5 años; NICE Clinical Guideline (abril de 2009; actualizado en octubre de 2022).
- Spinks A, Wasiak JEscopolamina (hioscina) para la prevención y el tratamiento de la cinetosis (Revisión Cochrane traducida). Cochrane Database Syst Rev. 2011 Jun 15;(6):CD002851.
- Boelig RC et al;. Intervenciones para el tratamiento de la hiperémesis gravídica (Revisión Cochrane traducida). Cochrane Database Syst Rev. 2016;(5):CD010607. Publicado el 11 de mayo de 2016. doi:10.1002/14651858.CD010607.pub2
- GastroenteritisNICE CKS, mayo de 2024 (sólo acceso en el Reino Unido)
- Náuseas y vómitos durante el embarazoNICE CKS, abril de 2025 (sólo acceso en el Reino Unido)
- Cuidados paliativos: náuseas y vómitosNICE CKS, marzo de 2021 (sólo acceso en el Reino Unido)
- Chadwick PR, Trainor E, Marsden GL, et al.Guidelines for the management of norovirus outbreaks in acute and community health and social care settings. J Hosp Infect. 2023 Jun;136:127-191. doi: 10.1016/j.jhin.2023.01.017. Epub 2023 Feb 15.
Historia del artículo
La información de esta página ha sido redactada y revisada por médicos cualificados.
Fecha de la próxima revisión: 4 de agosto de 2027
5 ago 2024 | Última versión

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