Dolor pélvico en las mujeres
Revisado por el Dr Doug McKechnie, MRCGPÚltima actualización por Dr Hayley Willacy, FRCGP Última actualización 21 Feb 2023
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El dolor pélvico es más frecuente en las mujeres. Hay muchas causas diferentes de dolor en la zona pélvica. Se pueden diferenciar por el momento en que suelen aparecer, si estás embarazada y si van acompañados de otros síntomas como hemorragias vaginales. A continuación se mencionan las causas más comunes. La mayoría mejoran con analgésicos. La mayoría de las causas recurrentes tienen tratamiento.
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¿Qué es el dolor pélvico?
El dolor pélvico suele ser un dolor que se origina en uno de los varios órganos situados en la pelvis (la parte más baja de la barriga). Estos órganos pélvicos son el intestino, la vejiga, la matriz (útero), las trompas de Falopio y los ovarios. En algunos casos, el dolor proviene de los huesos pélvicos que se encuentran junto a estos órganos, o de los músculos, nervios, vasos sanguíneos o articulaciones cercanos. Así pues, las causas del dolor pélvico son múltiples.
El dolor pélvico es más frecuente en las mujeres que en los hombres. En este folleto se tratan las causas más frecuentes de dolor pélvico en las mujeres.
El dolor pélvico puede ser agudo o crónico. Agudo significa que es la primera vez que tienes este tipo de dolor. Crónico significa que el dolor ha sido un problema durante mucho tiempo, más de seis meses.
Lista de reproducción: Preguntas y respuestas sobre el dolor pélvico
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¿Qué causa el dolor pélvico en las mujeres?
Dra. Sarah Jarvis MBE, FRCGP
¿Qué causa el dolor pélvico en las mujeres?
Dra. Sarah Jarvis MBE, FRCGP

¿Cuándo es normal el dolor pélvico?
Dra. Sarah Jarvis MBE, FRCGP

¿Cuánto dolor pélvico es normal durante el embarazo?
Dra. Sarah Jarvis MBE, FRCGP

¿Cómo se diagnostica el dolor pélvico?
Dra. Sarah Jarvis MBE, FRCGP
Síntomas del dolor pélvico en la mujer
Los síntomas del dolor pélvico incluyen:
Dolor asociado al intestino, por ejemplo durante la defecación.
Dolor asociado a la vejiga o al paso de la orina.
Dolor durante las relaciones sexuales.
Intestino
El dolor puede aparecer en diferentes partes del vientre (abdomen). El dolor suele aparecer y desaparecer. La duración y la intensidad de cada episodio de dolor pueden variar mucho. El dolor suele remitir al evacuar las heces. Muchas personas describen el dolor como un espasmo o un cólico. Otros síntomas pueden ser hinchazón del vientre, que puede aparecer de vez en cuando. Puede que expulse más gases de lo habitual. Algunas personas tienen episodios de diarrea, otras de estreñimiento y otras una combinación de ambos. Este grupo de síntomas puede denominarse síndrome del intestino irritable, aunque a veces también se presentan síntomas vesicales.
Vejiga
En el síndrome de vejiga dolorosa es frecuente experimentar molestias leves, presión, sensibilidad o dolor intenso en la vejiga y la zona pélvica. Estos síntomas suelen persistir durante varias semanas. La intensidad de los síntomas puede variar de un día a otro. Es probable que algunos días los síntomas sean más intensos que otros.
Además de este dolor, es probable que tenga síntomas como necesidad de orinar con más frecuencia y/o dolor al orinar. También es posible que no pueda retener la orina tanto tiempo como antes. Estos síntomas habrán durado más de seis semanas y no se habrá comprobado que se deban a otra causa, como una infección.
Dolor durante las relaciones sexuales (dispareunia)
El dolor que se siente en la zona genital o pélvica durante (o después de mantener) relaciones sexuales vaginales se denomina dispareunia. Puede dividirse en dispareunia superficial o profunda. Superficial significa que se siente en la superficie de la región genital.
La dispareunia profunda se siente en lo más profundo de la pelvis. Tienen causas y tratamientos diferentes y, aunque es posible experimentar ambas al mismo tiempo, la mayoría de las mujeres descubren que su dispareunia es predominantemente de uno u otro tipo.
La dispareunia profunda puede estar causada por los propios órganos genitales, pero también por otras estructuras del vientre (abdomen) que pueden golpearse fácilmente durante las relaciones sexuales (coito). Por lo tanto, hay muchas causas posibles de dolor profundo en la barriga durante las relaciones sexuales. La endometriosis, los quistes ováricos, la enfermedad inflamatoria pélvica y las infecciones de transmisión sexual son algunas de las posibles causas.
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¿Qué causa el dolor pélvico en las mujeres?
Ovulación
Ovular significa producir un óvulo desde el ovario. Algunas mujeres sienten un dolor agudo cuando se libera un óvulo. Este dolor ovulatorio se denomina "Mittelschmerz" (dolor intermedio, porque se produce a mitad del ciclo). El dolor puede aparecer en un lado distinto cada mes, dependiendo del ovario que libere el óvulo. Este dolor sólo dura unas horas, pero algunas mujeres lo consideran intenso.
Dolores menstruales
La mayoría de las mujeres sufren algún dolor durante la menstruación (ciclo menstrual). El dolor suele ser leve, pero en aproximadamente 1 de cada 10 mujeres es lo bastante intenso como para afectar a sus actividades cotidianas. El dolor puede ser tan intenso que las mujeres no pueden ir al colegio o al trabajo. Los médicos pueden denominar al dolor menstrual "dismenorrea". Para más información, consulte el folleto titulado Dolor menstrual (dismenorrea).
Enfermedad inflamatoria pélvica (EIP)
La EPI es una infección del útero. Los gérmenes (bacterias) que causan la infección suelen llegar al útero desde la vagina o el cuello uterino. En la mayoría de los casos la causa es la clamidia o la gonorrea. Los síntomas de la enfermedad inflamatoria pélvica son dolor en el bajo vientre o la pelvis, fiebre, sangrado vaginal anormal y flujo vaginal. Más información sobre la enfermedad inflamatoria pélvica.
Ruptura o torsión de quiste ovárico
Un quiste ovárico es un saco lleno de líquido que se desarrolla en un ovario. La mayoría de los quistes ováricos no son cancerosos (benignos) y no producen síntomas. Algunos causan problemas como dolor y hemorragias irregulares.
El dolor puede aparecer cuando revientan (rotura) o se tuercen (torsión). Algunos tipos de quistes ováricos no requieren tratamiento y tienden a desaparecer por sí solos. Más información sobre los quistes ováricos.
Cambios degenerativos en un fibroma
Los miomas son tumores no cancerosos que pueden aparecer en el útero. Son frecuentes y no suelen causar síntomas. Sin embargo, a veces pueden provocar menstruaciones abundantes, hinchazón abdominal y problemas urinarios. En raras ocasiones, el fibroma supera su riego sanguíneo. Esto puede hacer que se encoja (degenere), lo que puede ser muy doloroso. Para más información, consulte el folleto sobre miomas.
Endometriosis
Se trata de una enfermedad que afecta a mujeres de entre 13 y 50 años. Se diagnostica con mayor frecuencia en mujeres de treinta años. Es más frecuente en mujeres que tienen problemas para concebir. En estas mujeres puede darse en 1 de cada 5.
En la endometriosis, los parches de tejido uterino se encuentran fuera del útero y también pueden estar en las trompas de Falopio y los ovarios. Provoca dolor durante la menstruación. También puede causar dolor al mantener relaciones sexuales. Más información sobre la endometriosis.
Dolor pélvico crónico
Es el término que se utiliza cuando una mujer ha tenido dolor durante al menos seis meses. El dolor pélvico crónico puede presentarse en 1 de cada 6 mujeres, por lo que es muy frecuente. A veces se encuentra una causa (como las anteriores) y otras veces no hay una causa evidente. Si se encuentra el origen del dolor pélvico crónico, el tratamiento se centra en esa causa. Algunas mujeres nunca reciben un diagnóstico específico que explique su dolor.
Si no se encuentra ninguna causa, el tratamiento se centrará en controlar el dolor. Es útil llevar un diario de los síntomas. Esto puede identificar un patrón del dolor y los desencadenantes en su vida que pueden ser responsables. La depresión, el estrés crónico o los antecedentes de abusos sexuales o físicos aumentan el riesgo de padecer dolor pélvico crónico.
Además, cualquier malestar emocional suele empeorar el dolor, y vivir con dolor crónico contribuye al malestar emocional. Su médico a menudo considerará tratamientos psicológicos para ayudar con el dolor. Para más información, consulte la sección Lecturas complementarias y referencias.
Apendicitis
Apendicitis significa inflamación del apéndice. El apéndice es una pequeña bolsa que se desprende de la pared intestinal. La apendicitis es frecuente. Los síntomas típicos son dolor abdominal y náuseas (vómitos) que empeoran gradualmente a lo largo de 6-24 horas.
Algunas personas presentan síntomas menos típicos. La operación para extirpar el apéndice inflamado suele realizarse antes de que reviente (se perfore). La perforación del apéndice es grave. Para más información, consulte el folleto sobre apendicitis.
Síndrome del intestino irritable (SII)
El SII es un trastorno intestinal frecuente. Se desconoce su causa. Los síntomas pueden ser muy variables e incluir dolor abdominal, hinchazón y, a veces, episodios de diarrea y/o estreñimiento. Los síntomas tienden a aparecer y desaparecer. El SII no tiene cura, pero a menudo los síntomas pueden aliviarse con tratamiento. Para más información, consulte el folleto sobre el síndrome del intestino irritable.
Cistitis (infección de orina)
Se trata de una infección urinaria en la vejiga. Es frecuente en las mujeres. Se suele tratar con antibióticos de corta duración. Puede mejorar espontáneamente sin necesidad de antibióticos. En la mayoría de los casos, la cistitis desaparece rápidamente sin complicaciones. Para más información, consulte el folleto Cistitis (infección de orina) en la mujer.
Si tiene síntomas de cistitis pero no hay signos de infección en el análisis de orina, es posible que padezca cistitis intersticial. Se trata de una enfermedad poco conocida en la que se inflaman las paredes de la vejiga. Provoca dolor a largo plazo. También se conoce como "síndrome de vejiga dolorosa".
Adherencias
Las adherencias pueden aparecer tras una intervención quirúrgica abdominal o pélvica. A medida que el cuerpo intenta cicatrizar tras la intervención, los tejidos se vuelven pegajosos. La pegajosidad puede hacer que los tejidos se adhieran accidentalmente. El órgano más comúnmente afectado es el intestino. Esto puede causar dolor.
Hernia estrangulada
Una hernia se produce cuando hay un punto débil en la pared del abdomen. Como consecuencia, parte del contenido del abdomen puede salirse (abultarse) por debajo de la piel. Puede notar un bulto blando o hinchazón bajo la piel. Existe una pequeña posibilidad de que la hernia se estrangule.
Una hernia se estrangula cuando una cantidad excesiva de intestino ha atravesado el hueco del músculo o ligamento y queda comprimido. Esto puede cortar el suministro de sangre a la porción de intestino en la hernia. Esto puede provocar un dolor intenso y algunos daños en la parte del intestino que se encuentra en la hernia. Para más información, consulte el folleto sobre hernias.
Problemas musculares y óseos
Los problemas en la zona lumbar, los huesos de la pelvis y las articulaciones cercanas, como las de la cadera, pueden causar dolor. A menudo está claro el origen del dolor. Sin embargo, en algunos casos, el dolor puede sentirse como si estuviera en la pelvis y puede ser difícil precisar su origen.
Infecciones de transmisión sexual
Una infección de transmisión sexual (ITS) es una infección que puede transmitirse de una persona a otra al mantener relaciones sexuales. Se puede contraer una ITS practicando sexo vaginal, oral o anal. Existen varios tipos de ITS. S
os síntomas de cada ITS pueden variar, desde síntomas locales que afectan a los genitales hasta síntomas que afectan a otras partes del cuerpo. Entre los síntomas más comunes a los que hay que prestar atención se encuentran el flujo vaginal, el sangrado vaginal anormal, una llaga o úlcera, una erupción o un bulto que aparece alrededor de la vagina, la vulva o el conducto posterior (ano), dolor al mantener relaciones sexuales o dolor al orinar (aunque el motivo común de esto es una infección de orina y no una ITS).
Siempre debes buscar ayuda médica si el dolor pélvico se agrava

Causas del dolor pélvico en el embarazo
Aborto espontáneo
El aborto espontáneo es la pérdida de un embarazo en cualquier momento hasta la semana 24. 7 u 8 de cada 10 abortos espontáneos se producen antes de las 13 semanas de embarazo. Los síntomas habituales de aborto espontáneo son hemorragia vaginal y calambres en el bajo vientre (abdominales) o en la pelvis. A continuación, es posible que expulses algún tejido por la vagina, que a menudo tiene el aspecto de un coágulo de sangre. Para más información, consulta el folleto titulado Aborto espontáneo y hemorragias al principio del embarazo.
Embarazo ectópico
Un embarazo ectópico es un embarazo que intenta desarrollarse fuera de la matriz (útero). Los síntomas habituales son dolor en un lado del bajo vientre o la pelvis. Puede aparecer de forma aguda o empeorar lentamente a lo largo de varios días. Puede llegar a ser intenso. A menudo se produce sangrado vaginal, pero no siempre. Suele ser de un color más oscuro que el sangrado menstrual. Para más información, consulte el folleto Embarazo ectópico.
Ruptura de quiste del cuerpo lúteo
El cuerpo lúteo produce hormonas que ayudan a mantener el embarazo hasta que otros órganos, como la placenta, toman el relevo. Se forma tras la liberación del óvulo en la ovulación. Suelen detectarse por casualidad al realizar una ecografía por cualquier motivo. A menudo no causan ningún problema y desaparecen sin tratamiento. A veces puede hincharse demasiado y reventar. Esto puede provocar un dolor agudo en un lado de la pelvis. Si tienes dolor en la pelvis en las primeras 12 semanas de embarazo, acude a tu médico.
Parto prematuro
Normalmente, el parto se inicia después de 37 semanas completas de embarazo. El trabajo de parto normal suele comenzar con tensiones en la parte inferior del abdomen. Cada vez son más fuertes, dolorosas y cercanas entre sí. También es posible que tenga un "show". Se trata del tapón mucoso del cuello del útero (cérvix). Si te sale un chorro de líquido por la vagina, es posible que hayas roto aguas. Ponte inmediatamente en contacto con tu matrona. Si tienes dolores pélvicos intermitentes, consulta a tu matrona. Para más información, consulta el folleto titulado Parto prematuro.
Desprendimiento de la placenta
En raras ocasiones (unas 6 veces por cada 1.000 partos), la placenta se desprende de la pared del útero. Antes de las 24 semanas de embarazo se trata de un aborto espontáneo; sin embargo, después de las 24 semanas se denomina desprendimiento. Cuando se produce, es una urgencia. El bebé depende de la placenta para alimentarse y oxigenarse. Si la placenta no funciona, el bebé morirá. El personal del servicio de maternidad intentará atender rápidamente el parto. Suele ser por cesárea de urgencia.
Para más información sobre el dolor pélvico durante el embarazo , consulte el artículo independiente Cómo afrontar el dolor inguinal y pélvico durante el embarazo.
El embarazo podría ser la causa de tu dolor pélvico

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Is women's pain taken seriously?
Diagnosing the source of pain is not always easy. Without a visual cue like a cut, sprain or broken bone, recognising and treating pain relies on the patient describing their discomfort as accurately as they can. This can be hard - as we all feel it differently. More importantly, a doctor can only diagnose and treat a patient on the basis that they trust what they are saying. We all expect to be taken seriously by health professionals, but mounting evidence points to a worrying trend: all too often, women are met with doubt when it comes to their pain.
por Lydia Smith

Salud de la mujer
Prolapso de órganos pélvicos
Los órganos del interior de la pelvis de la mujer son el útero, la vejiga y el recto. Normalmente, se sostienen y mantienen en su posición gracias a determinadas estructuras, como los ligamentos y los músculos de la parte inferior de la pelvis (músculos del suelo pélvico). El prolapso de órganos pélvicos (también conocido como prolapso genitourinario) se produce cuando estas estructuras de soporte normales se debilitan y dejan de ser eficaces. El resultado es que uno (o más) de los órganos del interior de la pelvis desciende (prolapso). El espacio disponible para que el órgano u órganos caigan es la vagina. Puede haber distintos grados de prolapso, dependiendo de lo mucho o lo lejos que el órgano u órganos hayan descendido hasta la vagina. A veces, el prolapso puede ser tan grande que hace que las paredes de la vagina, o el útero, o ambos, sobresalgan por fuera de la abertura de la vagina.
por el Dr. Toni Hazell, MRCGP
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Tratamientos para el dolor pélvico
El tratamiento del dolor pélvico en las mujeres dependerá de la causa. Si estás segura de conocer la causa o el dolor -por ejemplo, dolor menstrual- , puedes probar a tomar un analgésico como el paracetamol o el ibuprofeno.
Si no estás segura de la causa del dolor o si éste es intenso, debes acudir al médico. En particular, algunas causas son urgentes: por ejemplo, un embarazo ectópico. Si lo sospechas, acude urgentemente al médico. También puedes acudir al médico si el dolor reaparece. Existen tratamientos para muchas de las enfermedades mencionadas.
¿Cómo se diagnostica el dolor pélvico?
Su médico le hará algunas preguntas y le examinará. En función de lo que encuentre, puede aconsejarle que se someta a más pruebas.
Una infección de orina es una causa muy frecuente de dolor pélvico, por lo que el médico puede pedirle una muestra de orina. Se pueden utilizar hisopos para detectar infecciones, incluidas las de transmisión sexual, como la clamidia y la gonorrea. t Si se sospecha un embarazo ectópico o un aborto espontáneo, el médico puede concertar una ecografía urgente en el hospital local. Se puede organizar una ecografía rutinaria para diagnosticar problemas como quistes ováricos.
Los ginecólogos suelen realizar una laparoscopia cuando el dolor persiste y no se ha encontrado una causa. En este procedimiento, se introduce un pequeño telescopio a través de un pequeño corte en el ombligo. Esto permite al médico ver el interior de la pelvis. Para más información, consulte el folleto Laparoscopia y cirugía laparoscópica.
Los médicos especializados en el intestino pueden utilizar telescopios flexibles para observar el interior del intestino si se sospecha una causa intestinal. La gastroscopia permite ver el esófago y el estómago. Para más información, consulte el folleto separado Gastroscopia (endoscopia). La parte inferior del intestino (recto y colon) se examina mediante colonoscopia.
¿Qué se puede aconsejar para ayudar a gestionar el problema?
Dependerá de la causa probable. Siga los enlaces anteriores a los distintos folletos para obtener más información al respecto.
Si el problema no es una urgencia, su médico puede remitirle a un especialista para que le haga más pruebas.
Lecturas complementarias y referencias
- Cheong YC, Smotra G, Williams ACIntervenciones no quirúrgicas para el tratamiento del dolor pélvico crónico (Revisión Cochrane traducida). Cochrane Database Syst Rev. 2014 Mar 5;3:CD008797. doi: 10.1002/14651858.CD008797.pub2.
- Endometriosis: diagnóstico y tratamientoDirectrices del NICE (septiembre de 2017 - última actualización noviembre de 2024)
- 2019 Guía nacional del Reino Unido para el manejo de la enfermedad inflamatoria pélvica; Asociación Británica para la Salud Sexual y el VIH (BASHH - 2018, última actualización 2019)
- Directrices sobre el dolor pélvico crónico; Asociación Europea de Urología (2022)
Historia del artículo
La información de esta página ha sido redactada y revisada por médicos cualificados.
Fecha prevista para la próxima revisión: 20 feb 2028
21 Feb 2023 | Última versión
19 Jul 2012 | Publicado originalmente
Autores:
Dra. Hayley Willacy, FRCGP

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