Trastorno de la articulación temporomandibular (TTM)
Revisado por Dr Toni Hazell, MRCGPÚltima actualización por Dr Rosalyn Adleman, MRCGPÚltima actualización 18 Nov 2024
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Los trastornos temporomandibulares son problemas que afectan a la articulación de la mandíbula y a los músculos y otros tejidos que la rodean. Estos trastornos suelen causar dolor o reducción del movimiento de la mandíbula, y a veces sonidos como chasquidos o rechinidos de la articulación mandibular. Existen diversas causas, pero en general los trastornos temporomandibulares no son graves y suelen mejorar con tratamientos sencillos.
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¿Qué son los trastornos temporomandibulares?
Los trastornos temporomandibulares (TTM) son problemas que afectan a la articulación de la mandíbula.
La articulación mandibular está situada justo delante de la oreja y une el hueso maxilar (mandíbula) con el cráneo, cerca de la sien. La articulación mandibular también se denomina "articulación temporomandibular". Los problemas que afectan a esta articulación se conocen como trastornos de la ATM. Sin embargo, existen otras causas de dolor mandibular, por lo que las diversas afecciones que afectan a la articulación se denominan ahora "trastornos temporomandibulares (TTM)".
Disfunción de la ATM

Comprender la articulación de la mandíbula
Una articulación es el lugar donde se unen dos huesos. Las articulaciones permiten el movimiento y la flexibilidad entre dos huesos. La articulación de la mandíbula permite el movimiento entre el hueso maxilar (mandíbula) y el cráneo. Los músculos unidos al cráneo y a la mandíbula hacen que ésta se mueva al abrir y cerrar la boca.
Dentro de la articulación de la mandíbula, hay un material liso llamado cartílago, que recubre parte de los huesos. También hay un disco cartilaginoso dentro de la articulación. La articulación está lubricada por un líquido llamado líquido sinovial.
Los músculos utilizados para masticar (masticación) son los principales responsables del movimiento de la mandíbula.
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Síntomas de los TTM
Dolor en la zona de la articulación o cerca de ella. El dolor suele localizarse justo delante de la oreja y puede extenderse a la mejilla, la propia oreja y la sien.
Los movimientos de la mandíbula pueden verse reducidos. Puede tratarse de una sensación general de opresión o de que la mandíbula se atasca. En muy raras ocasiones, la mandíbula puede "bloquearse", causando dificultad para abrir o cerrar la boca.
A veces se oyen chasquidos o ruidos procedentes de la articulación de la mandíbula al masticar o mover la boca. Estos ruidos pueden ser normales, por lo que solo son relevantes si tienes otros síntomas en la articulación, como dolor o reducción del movimiento.
Dado que el oído está muy cerca de la articulación de la mandíbula, algunas personas desarrollan síntomas en el oído como:
Ruido en el oído.
Sensibilidad al sonido.
Mareos (vértigo).
Tratamiento de los TTM
La mayoría de los problemas de la articulación de la mandíbula pueden solucionarse con tratamientos sencillos, como analgésicos y consejos para descansar la articulación. Si cree que padece un TTM, consulte a su dentista. Existen varios tratamientos que a menudo se combinan:
Reposo de la articulación mandibular
En reposo, intenta mantener los dientes ligeramente separados y la lengua apoyada en el fondo de la boca.
Puedes descansar la articulación comiendo alimentos blandos y no utilizando chicles.
Evita también abrir mucho la boca, así que no cantes demasiado e intenta no bostezar demasiado.
Masajear los músculos y aplicar calor puede ayudar.
Mejorar la postura puede ayudar, por ejemplo, cuando se está mucho tiempo sentado frente al ordenador.
Otros tratamientos son las terapias de relajación y reducción del estrés, presumiblemente porque la gente tiende a apretar la mandíbula cuando está estresada, o porque el estrés empeora el dolor.
A veces se recomiendan férulas o protectores de mordida. Éstas cubren los dientes por la noche para reducir el apretamiento de la mandíbula y pueden ser fabricadas por dentistas. No hay pruebas definitivas de que funcionen, pero a algunas personas les resultan útiles.
Medicación
Los analgésicos como el paracetamol, el ibuprofeno o la codeína pueden ayudar. Si no son suficientes, los relajantes musculares o una pequeña dosis de antidepresivos tricíclicos o gabapentina pueden aliviar el dolor.
Fisioterapia
Los tratamientos de fisioterapia, como los ultrasonidos y los ejercicios suaves de mandíbula, pueden ser útiles.
Ejercicios para el dolor de mandíbula:
Antes de empezar, caliente la zona de la mandíbula con una bolsa de agua caliente o una bolsa de trigo. Esto facilitará el movimiento de los músculos.
Coloque los dedos en la parte delantera de la barbilla e intente mover la mandíbula inferior hacia delante contra la resistencia de los dedos. Mantenga esta posición durante unos segundos y luego relájese. Repítalo tres veces.
Coloque los dedos bajo la barbilla e intente abrir la mandíbula contra resistencia. Mantenga esta posición durante unos segundos y luego relájese. Repítalo tres veces.
Coloque los dedos a un lado de la mandíbula inferior e intente moverla lateralmente contra la resistencia de los dedos. Mantenga esta posición durante unos segundos y luego relájese. Repítalo tres veces. A continuación, haga lo mismo en el otro lado.
Coloque los dedos sobre la articulación de la mandíbula y abra suavemente la boca todo lo que pueda. Procure que la mandíbula se abra recta y no hacia un lado.
Puedes repetir estos ejercicios varias veces al día hasta que los síntomas remitan.
Tratamiento de otras afecciones
Si existe una enfermedad subyacente -por ejemplo, un tipo de artritis que contribuya a los trastornos temporomandibulares-, puede ser necesario tratarla por sí misma.
Inyecciones o cirugía
Una inyección de un medicamento llamado esteroide en la articulación puede ayudar, cuando los síntomas se deben a la inflamación de la articulación.
Si los músculos de la mandíbula están muy hiperactivos (como en el caso de un trastorno del movimiento), una inyección de toxina botulínica (Botox®) puede reducir los síntomas. Existe debate sobre la eficacia de este tratamiento.
La inserción de un dispositivo de fibra óptica (artroscopia) puede utilizarse para algunos tipos de tratamiento o cirugía de la articulación.
En muy pocos pacientes puede sugerirse la reparación quirúrgica de la articulación. Se pueden realizar varias operaciones, dependiendo de la situación individual.
Otros tratamientos
Se han probado otros tratamientos que pueden estar disponibles en algunas zonas. Estos tratamientos incluyen el kinesio taping y la acupuntura.
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¿Son frecuentes los trastornos temporomandibulares?
Los TTM son bastante frecuentes. Aproximadamente 1 de cada 4 personas presenta síntomas en la articulación de la mandíbula en algún momento de su vida. De estas personas, solo 1 de cada 20 consulta a un médico por este problema.
¿Cuáles son las causas de los trastornos temporomandibulares?
En general, se cree que los TTM tienen una causa "multifactorial", lo que significa que suele haber una serie de factores que contribuyen a la causa. Estos factores pueden agruparse en dos tipos:
Problemas relacionados con los músculos que trabajan la articulación.
Problemas dentro de la propia articulación.
Los problemas musculares son los más frecuentes, sobre todo en los jóvenes.
Los problemas musculares pueden deberse a:
Tensión de los músculos de la mandíbula. Esto puede ocurrir si aprietas mucho la mandíbula mientras duermes, lo cual es bastante frecuente. Algunas personas también aprietan la mandíbula durante el día si se sienten tensas o ansiosas.
Uso excesivo de los músculos de la mandíbula, como mascar chicle o morderse las uñas habitualmente.
En raras ocasiones, otras afecciones hacen que los músculos de la mandíbula sean hiperactivos. Por ejemplo, hay algunos tipos raros de trastornos del movimiento (denominados distonías orofaciales) que provocan un apretamiento excesivo de la mandíbula.
Aumento de la sensibilidad al dolor. No sabemos por qué ocurre esto, pero puede estar relacionado con el estrés o con algún otro proceso que afecte a la sensibilidad al dolor. Algunos médicos llaman a este tipo de problema síndrome de dolor porque se desconoce la causa exacta del dolor.
Los problemas en la articulación pueden deberse a:
Desgaste del interior de la articulación: por ejemplo, desgaste del cartílago. A veces esto se debe a un tipo de artritis llamada osteoartritis. Este problema suele afectar más a las personas mayores que a los jóvenes.
Otros tipos de artritis. Artritis significa inflamación de una articulación. Hay distintos tipos de artritis. Por ejemplo, la artritis reumatoide y la gota son dos tipos de artritis que pueden afectar a varias articulaciones del cuerpo y a veces pueden afectar a la articulación de la mandíbula.
Una lesión en la ATM o en su disco cartilaginoso puede causar dolor en la ATM.
¿Cómo se diagnostican los trastornos temporomandibulares?
A menudo, el diagnóstico se realiza sobre la base de sus síntomas y un examen odontológico o médico. En muchos casos, no es necesario realizar pruebas si estás sano y tienes los síntomas típicos de un TTM. Si tus síntomas no se resuelven con un simple consejo y tratamiento, es posible que te remitan a un especialista para que te realice pruebas y te ofrezca tratamiento adicional. Las pruebas posibles son:
Análisis de sangre que pueden ser útiles para buscar signos de inflamación o para descartar otras causas de dolor en esa zona.
Se pueden utilizar radiografías para evaluar los dientes y buscar fracturas, dislocaciones articulares o desgaste grave (degeneración) de la articulación de la mandíbula.
Se puede utilizar una resonancia magnética o un TAC para obtener una imagen detallada de la articulación.
Utilización de un dispositivo de fibra óptica (artroscopia) para observar el interior de la articulación. Puede utilizarse si otras pruebas no muestran la causa del dolor.
¿Cuál es el pronóstico?
En general, las perspectivas son buenas. La mayoría de los TMD mejoran con el tiempo y no empeoran. Es muy raro que se produzcan complicaciones. Algunas personas tienen síntomas que duran más o reaparecen. Sin embargo, incluso éstos suelen mejorar con los tratamientos descritos anteriormente. La mayoría de las personas no necesitan inyecciones ni cirugía y mejoran con tratamientos sencillos y tiempo.
Lecturas complementarias y referencias
- Buescher JJTrastornos de la articulación temporomandibular. Am Fam Physician. 2007 Nov 15;76(10):1477-82.
- Coskun Benlidayi I, Salimov F, Kurkcu M, et al.Kinesio Taping para trastornos temporomandibulares: Single-blind, randomized, controlled trial of effectiveness. J Back Musculoskelet Rehabil. 2016 Feb 19.
- Pihut M, Ferendiuk E, Szewczyk M, et al.The efficiency of botulinum toxin type A for the treatment of masseter muscle pain in patients with temporomandibular joint dysfunction and tension-type headache. J Headache Pain. 2016 Dic;17(1):29. doi: 10.1186/s10194-016-0621-1. Epub 2016 mar 24.
- Trastornos temporomandibulares (TTM)NICE CKS, mayo de 2024 (sólo acceso en el Reino Unido)
- Ghurye S, McMillan RDolor orofacial: actualización sobre diagnóstico y tratamiento. Br Dent J. 2017 Dec;223(9):639-647. doi: 10.1038/sj.bdj.2017.879. Epub 2017 oct 27.
Historia del artículo
La información de esta página ha sido redactada y revisada por médicos cualificados.
Fecha límite de la próxima revisión: 17 nov 2027
18 Nov 2024 | Última versión

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