¿Comer picante ayuda a adelgazar?

Es comprensible que muchos de nosotros evitemos las comidas que contienen chile, debido a los efectos de la capsaicina (la sustancia química que produce el picante) y a las reacciones que puede provocar en la boca y el aparato digestivo. Sin embargo, se afirma que el picante puede estimular el metabolismo y ayudar a perder peso. ¿Qué pruebas hay?

Guindillas y pérdida de peso

Resulta que se han publicado varios estudios científicos que relacionan el chile picante con la pérdida de peso.

"Los capsaicinoides son un grupo de sustancias químicas presentes de forma natural en los pimientos picantes", explica la nutricionista Emma Derbyshire. "Tienen propiedades que pueden ayudar a controlar el peso".

Derbyshire revela que, aunque los cuerpos de cada persona reaccionan al picante de forma muy diferente, la investigación indica que: "El consumo diario de capsaicina puede contribuir a la pérdida de peso mediante la reducción de la ingesta energética".

Explica que esto significa que comer comida picante podría hacer que quisieras ingerir menos calorías de las que ingerirías en otras circunstancias. Este podría ser el principal motivo por el que a veces se asocia la comida picante con la pérdida de peso.

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por Abi Millar

¿Acelerar el metabolismo?

Pero, ¿aceleran realmente los chiles el ritmo metabólico? ¿Y qué entendemos por metabolismo? La nutricionista Rose Constantine-Smith nos lo explica:

"El metabolismo es 'el proceso de generación de energía a partir de los nutrientes'. En pocas palabras, es el proceso que debe seguir nuestro cuerpo para obtener energía de los alimentos que ingerimos."

Explica que la energía que nuestro cuerpo utiliza simplemente para existir (para que funcionen nuestros órganos vitales) constituye entre el 56 y el 80% de nuestra energía total. Es lo que se conoce como tasa metabólica basal (TMB). No tiene en cuenta nada más, como caminar, hablar o comer".

Por lo tanto, un metabolismo bajo podría describirse más exactamente como "BMR bajo". Constantine-Smith explica que la TMB de cada persona es diferente. Y hay varias cosas que pueden afectarla, revela:

Genes

El modo en que utilizas la energía puede verse afectado en cierta medida por tu genética, aunque esto aún no se comprende del todo.

Composición corporal

El músculo quema más energía que la grasa, por lo que cuanto mayor sea la proporción entre músculo y grasa, más energía se quemará.

Sexo

Como, en general, los hombres tienden a tener una proporción músculo-grasa más elevada que las mujeres, su BMR es mayor.

Edad

A medida que envejecemos, nuestra TMB tiende a reducirse. Se cree que esto se debe a la pérdida de masa muscular que suele producirse con la edad.

Peso corporal

Cuanto mayor es el cuerpo, más energía se necesita para mantenerlo.

Pero, ¿un metabolismo lento provoca un aumento de peso? Por desgracia, dice Constantine-Smith, no es tan sencillo.

"La mayoría de las veces, las pruebas actuales no indican esto. Sobre todo porque un cuerpo más grande necesita más energía para sobrevivir. Hay algunas excepciones: una glándula tiroides poco activa, por ejemplo, ralentiza el metabolismo y suele provocar un aumento de peso aunque no se coma más. Pero la gente puede engordar por muchas razones, como comer más de lo que el cuerpo necesita, falta de ejercicio, estrés, falta de sueño y enfermedad".

¿Pueden ayudar los chiles? Constantine-Smith afirma: "Es cierto que en algunos estudios se ha descubierto que la capsaicina del chile aumenta el ritmo de nuestro metabolismo y, por tanto, la velocidad a la que quemamos calorías. Sin embargo, estas afirmaciones son débiles. E incluso si es cierto, el efecto es muy, muy mínimo y parece ser sólo algo temporal y a corto plazo".

Nuestra opinión

Así que ahí lo tienes: un toque de picante puede ser beneficioso de vez en cuando, pero no esperes que sea una solución rápida.

Si no te gusta el picante, ¡que no cunda el pánico! Hay formas mucho más eficaces de perder peso sin tener que ponerte incómodo. Es mucho mejor que mejores tu dieta, hagas más ejercicio y duermas bien.

Cuando se trata de guindillas, cómelas porque te gusta su sabor, no porque creas que te van a ayudar a perder kilos.