Clorpromazina

Acerca de la clorpromazina

La clorpromazina pertenece a un grupo de medicamentos denominados "fenotiazinas". Se receta para diversas afecciones, muchas de las cuales no están relacionadas entre sí.

Se prescribe para:

• Los síntomas de la esquizofrenia y otros problemas de salud mental similares que afectan a los pensamientos, sentimientos y comportamientos. Estos problemas se denominan psicosis.

• Tratamiento a corto plazo de la ansiedad grave, la agitación o el comportamiento peligroso repentino.

• Niños con autismo.

• Malestar (náuseas) asociado a enfermedades avanzadas o terminales.

• Hipo que no puede detenerse de otro modo.

Antes de tomar clorpromazina

Algunos medicamentos no son adecuados para personas con determinadas afecciones, y a veces un medicamento sólo puede utilizarse si se toman precauciones adicionales. Por estas razones, antes de empezar a tomar clorpromazina es importante que su médico lo sepa:

• Si está embarazada o en periodo de lactancia.

• Si padece una cardiopatía o una enfermedad vascular.

• Si tiene problemas de hígado, riñón, tiroides o próstata.

• Si tiene problemas respiratorios.

• Si padece alguno de los siguientes trastornos: epilepsia, diabetes, depresión, enfermedad de Parkinson, presión ocular elevada (glaucoma) o miastenia grave, una enfermedad que provoca debilidad muscular.

• Si alguna vez ha tenido la piel o el blanco de los ojos amarillentos (ictericia) o algún trastorno sanguíneo.

• Si tiene un tumor en la glándula suprarrenal, una enfermedad llamada feocromocitoma.

• Si alguna vez ha tenido una reacción alérgica a un medicamento.

• Si toma o utiliza otros medicamentos. Esto incluye cualquier medicamento que esté tomando y que pueda adquirirse sin receta, así como medicamentos a base de plantas y complementarios.

Cómo tomar clorpromazina

• Antes de empezar el tratamiento, lea el prospecto impreso del fabricante que se encuentra en el interior del envase. En él encontrará más información sobre la clorpromazina, así como una lista completa de los efectos secundarios que puede experimentar al tomarla.

• Su dosis dependerá del motivo por el que se la hayan recetado, así que tome la clorpromazina exactamente como le indique su médico. A título orientativo, a menudo se prescribe tomarla tres o cuatro veces al día. Acostúmbrese a tomar la dosis a la misma hora todos los días, para evitar saltársela. Puede tomar la clorpromazina antes o después de las comidas.

• Trague los comprimidos enteros con un vaso de agua; no los rompa ni los triture. Si tiene dificultades para tragar los comprimidos, informe a su médico para que le recete un medicamento líquido en su lugar.

• Si olvida tomar una dosis, tómela en cuanto se acuerde, a menos que sea casi la hora de la siguiente, en cuyo caso omita la dosis olvidada. No tome dos dosis juntas para compensar la dosis olvidada.

Aproveche al máximo su tratamiento

• Acuda regularmente al médico para que pueda controlar su evolución. Si toma clorpromazina a largo plazo, es posible que deba someterse a algunas pruebas de vez en cuando.

• Si bebe alcohol, pida consejo a su médico sobre el consumo de alcohol mientras esté tomando clorpromazina. El alcohol aumentará la posibilidad de que experimente efectos secundarios y es poco probable que se recomiende en su caso.

• La clorpromazina puede hacer que su piel se vuelva más sensible a la luz solar de lo normal. Utilice un protector solar que le proteja frente a la luz UVA y que tenga un factor de protección solar (FPS) de al menos 15, especialmente con luz solar intensa o hasta que sepa cómo reacciona su piel. No utilice camas solares.

• Si va a someterse a una operación, comunique a la persona que lleve a cabo el tratamiento qué medicamentos está tomando. Esto es importante porque la clorpromazina puede interferir con la anestesia que reciba.

• Si compra o toma medicamentos "sin receta", compruebe en la farmacia que son adecuados para tomar con clorpromazina. Los antiácidos no deben tomarse al mismo tiempo, ya que reducen la cantidad de clorpromazina absorbida por el organismo.

• Si padece diabetes, controle regularmente sus niveles de glucosa en sangre, ya que la clorpromazina puede afectar a los niveles de azúcar en sangre.

• Fumar puede afectar la cantidad de clorpromazina en su cuerpo. Informe a su médico si empieza o deja de fumar mientras está tomando clorpromazina.

• Cuando se ha tomado clorpromazina durante un tiempo, la interrupción brusca del tratamiento puede causar problemas. Si la ha estado tomando con regularidad, su médico probablemente querrá que reduzca la dosis gradualmente si es necesario.

¿Puede causar problemas la clorpromazina?

Además de sus efectos útiles, la mayoría de los medicamentos pueden producir efectos secundarios no deseados, aunque no todas las personas los sufran. La siguiente tabla contiene algunos de los efectos secundarios más frecuentes relacionados con la clorpromazina. Encontrará la lista completa en el prospecto del fabricante que acompaña al medicamento. Los efectos no deseados suelen mejorar a medida que su organismo se adapta al nuevo medicamento, pero consulte a su médico o farmacéutico si alguno de los siguientes efectos persiste o se hace molesto.

Importante: si experimenta síntomas como rigidez muscular, temperatura muy alta, sensación de confusión, latidos cardíacos rápidos y sudoración, debe ponerse en contacto con su médico inmediatamente. Pueden ser signos de una enfermedad rara pero grave conocida como síndrome neuroléptico maligno.

Si experimenta cualquier otro síntoma que considere que puede deberse a este medicamento, consulte a su médico o farmacéutico.

Cómo conservar la clorpromazina

• Mantenga todos los medicamentos fuera del alcance y de la vista de los niños.

• Almacenar en un lugar fresco y seco, lejos del calor y la luz directos.

• En el caso de los medicamentos orales líquidos, lea la información del fabricante que acompaña al medicamento para saber cuánto dura una vez abierto.
  

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