Ciclosporina, un inmunosupresor

Acerca de la ciclosporina

La ciclosporina pertenece a un grupo de medicamentos denominados inmunosupresores. Se utiliza para reducir el rechazo tras el trasplante de órganos y médula ósea, y para tratar diversas enfermedades inflamatorias y autoinmunes de larga duración (crónicas). Se la recetará un médico especialista.

Para reducir el rechazo de órganos: tras un trasplante de órganos o médula ósea, el organismo puede intentar rechazar el tejido nuevo del donante. La ciclosporina ayuda a evitarlo suprimiendo el sistema inmunitario o de defensa del organismo.

Para tratar enfermedades inflamatorias y autoinmunitarias de larga duración: en afecciones como la artritis reumatoide y la dermatitis y psoriasis graves, la ciclosporina puede ayudar a reducir los síntomas al inhibir el sistema inmunitario. El síndrome nefrótico es una afección en la que la orina contiene grandes cantidades de proteínas procedentes de la sangre porque los "filtros" del riñón no funcionan correctamente. La ciclosporina también puede ayudar a corregir este problema.

Además de las enfermedades mencionadas anteriormente, la ciclosporina también es recetada a veces por médicos especialistas a personas con colitis ulcerosa (aunque el medicamento no está autorizado para su uso en esta enfermedad). Si se la han recetado por este motivo, hable con su médico si tiene alguna duda sobre su tratamiento.

Antes de tomar ciclosporina

Algunos medicamentos no son adecuados para personas con determinadas afecciones, y a veces un medicamento sólo puede utilizarse si se toman precauciones adicionales. Por estas razones, antes de empezar a tomar ciclosporina es importante que su médico lo sepa:

• Si está embarazada, esperando un bebé o en período de lactancia.

• Si tiene algún problema con el funcionamiento de su hígado, o algún problema con el funcionamiento de sus riñones (a menos que éste sea el motivo del tratamiento).

• Si tiene la tensión alta.

• Si actualmente tiene una infección.

• Si tiene cáncer (a menos que éste sea el motivo del tratamiento).

• Si le han dicho que tiene altos niveles de ácido úrico en la sangre.

• Si toma o utiliza otros medicamentos. Esto incluye cualquier medicamento que esté tomando y que pueda adquirirse sin receta, así como medicamentos a base de plantas y complementarios.

• Si alguna vez ha tenido una reacción alérgica a un medicamento.
  

Cómo tomar ciclosporina

• Antes de empezar el tratamiento, lea el prospecto impreso del fabricante que se encuentra en el interior del envase. En él encontrará más información sobre la ciclosporina y cómo tomarla. También le proporcionará una lista completa de los efectos secundarios que puede experimentar al tomar el medicamento.

• Su médico le prescribirá una dosis adaptada a su peso y al motivo por el que la toma. Lo habitual es tomar dos dosis de ciclosporina al día (por la mañana y por la noche). Hay cápsulas de varias concentraciones y es posible que su dosis incluya más de una concentración. Asegúrese de tomar la ciclosporina exactamente como le indique su médico. Su dosis estará impresa en la(s) etiqueta(s) del(de los) envase(s) para recordarle lo que le ha dicho el médico.

• Intente tomar la dosis a la misma hora todos los días, ya que esto le ayudará a acordarse de tomarla con regularidad. Si olvida tomar una dosis, tómela en cuanto se acuerde (a menos que sea casi la hora de la siguiente, en cuyo caso omita la dosis olvidada). No tome dos dosis juntas para compensar la dosis olvidada.

• Si le han dado cápsulas para tomar, trague cada dosis con un vaso pequeño de agua. No mastique ni abra las cápsulas.

• Si le han administrado la solución oral (medicamento líquido), siga al pie de la letra las instrucciones del fabricante. Mida su dosis con las jeringas dosificadoras suministradas y añádala a un vaso de agua. Remuévalo bien antes de beberlo. Para asegurarse de que toma la dosis completa, después de tragar la bebida, añada un poco más de agua al vaso vacío, remuévalo y bébalo también. Si lo prefiere, puede tomar su dosis mezclada con zumo de naranja (o calabaza) o zumo de manzana en lugar de agua, pero nunca debe mezclarla con zumo de pomelo. No lave la jeringuilla después de usarla; límpiela con un pañuelo de papel seco.

• Su médico le indicará la duración prevista del tratamiento. Puede ser de varias semanas a un año. Siga tomando ciclosporina hasta que su médico le diga lo contrario.

Aproveche al máximo su tratamiento

• No beba zumo de pomelo mientras esté tomando ciclosporina. Esto se debe a que una sustancia química presente en el zumo de pomelo aumenta la cantidad de ciclosporina en el torrente sanguíneo. Esto aumenta la probabilidad de efectos secundarios.

• Existen varias marcas de ciclosporina y el organismo no las absorbe todas exactamente igual. Por ello, su médico le recetará la misma marca de ciclosporina cada vez que necesite un nuevo suministro. Si cuando reciba una nueva dosis tiene un aspecto diferente al que tenía antes, pida a su farmacéutico que lo compruebe y le aconseje sobre lo que debe hacer.

• Procure acudir a todas las citas periódicas con su médico. Así podrá comprobar su evolución. Su médico querrá controlar su tensión arterial y hacerle algunos análisis de sangre, antes y durante el tratamiento, para comprobar que sus riñones y su hígado funcionan bien. La ciclosporina puede alterar los niveles de algunos electrolitos (sales) y lípidos (grasas) en la sangre, por lo que su médico también querrá comprobarlo.

• Mientras esté tomando ciclosporina, y durante un tiempo después de interrumpir el tratamiento, no se aplique ningún tipo de inmunización (vacunas) sin consultarlo antes con su médico. La ciclosporina disminuye la resistencia de su organismo y existe el riesgo de que contraiga una infección por la vacuna. Además, algunas vacunas pueden ser menos eficaces.

• Su médico comentará con usted la posibilidad de un ligero aumento del riesgo de cáncer (sobre todo de piel) asociado a inmunosupresores como la ciclosporina. Por ello, es importante que no utilice camas solares, evite la luz solar intensa y utilice una crema solar con un factor de protección elevado (FPS de al menos 15). Si padece psoriasis, no se someta a tratamientos PUVA o UVB.

• Debe evitar quedarse embarazada mientras esté tomando ciclosporina. Asegúrese de haber consultado con su médico qué métodos anticonceptivos son adecuados para usted y su pareja.

• Si va a someterse a una operación o a un tratamiento dental, informe a la persona que le realice el tratamiento de que está tomando ciclosporina.

• Si compra algún medicamento o remedio a base de plantas, consulte a su médico o farmacéutico para asegurarse de que puede tomarlo sin peligro. La ciclosporina interfiere en el funcionamiento de otros medicamentos y viceversa. Además, algunos analgésicos antiinflamatorios de venta libre aumentan el riesgo de efectos secundarios de la ciclosporina y deben evitarse.

• Si bebe alcohol, pida consejo a su médico. Muchos preparados de ciclosporina contienen una pequeña cantidad de alcohol y su médico puede recomendarle que evite las bebidas alcohólicas.

¿Puede causar problemas la ciclosporina?

Su médico le habrá hablado de la posibilidad de que aparezcan efectos secundarios no deseados y de cómo se le controlará periódicamente para detectar signos de los mismos. También le habrá dicho que puede ser más propenso a las infecciones. A continuación se enumeran algunos de los efectos no deseados más frecuentes de la ciclosporina. Informe a su médico si alguno de los siguientes efectos persiste o se vuelve molesto, o si experimenta cualquier otro síntoma que le preocupe o que crea que puede deberse al medicamento.

Cómo conservar la ciclosporina

• Mantenga todos los medicamentos fuera del alcance y de la vista de los niños.

• Almacenar en un lugar fresco y seco, lejos del calor y la luz directos.

Información importante sobre todos los medicamentos